«A mi tía María Dolores, por haber tenido el privilegio de ser su guía en este lado, días antes de su reciente partida«.
MAYODEL68
“Desconozco el cómo pero se que estuve allí.
El lugar no puedo describirlo con claridad pero lo cierto es, que se respiraba paz, mucha paz.
Un ser bellísimo alto, muy alto y rubio de larga cabellera me esperaba para guiarme. Vestía una especie de blusón largo y suelto, de color blanco inmaculado y doblez en los puños, con marcado color dorado.
Ante el desconcierto de la situación que estaba viviendo, el guía, consiente de mi desorientación, se aproximó y me dijo: Continuar leyendo «DESDE EL OTRO LADO»